Conoce a Dios personalmente
«El que tiene al Hijo tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas les he escrito a ustedes que creen en el nombre del Hijo de Dios para que sepan que tienen vida eterna.» 1 Juan 5:12-13
Cómo conocer a Dios
«Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por Mí‘». Juan 14:6
«Pero a todos los que le recibieron, a los que creen* en Su nombre, les dio derecho de ser hechos hijos de Dios». Juan 1:12
*Confiar en, depender, recibir a Jesucristo como tu Salvador personal.
Perder los bienes es mucho,
Perder la salud es aun más.
Perder el alma es Pérdida tal,
Que no se recobra jamás.
La eternidad nunca termina:
Cielo o Infierno
La eternidad es una realidad a la que cada uno de nosotros se enfrentará, y es una elección con consecuencias eternas. El Cielo es un lugar de gozo eterno, paz y comunión con Dios, reservado para quienes aceptan Su don de la salvación mediante la fe en Jesucristo. El infierno, en cambio, es la separación eterna de Dios, un lugar de dolor y arrepentimiento para los que rechazan Su amor.
La elección es nuestra, y es la decisión más importante de nuestras vidas. Dios desea que todos pasen la eternidad con Él en el cielo, ofreciéndoles el perdón y la redención a través de Su Hijo. Reflexiona sobre esta verdad, busca Su gracia y vive pensando en la eternidad, sabiendo que las decisiones que tomamos hoy conforman nuestra vida para siempre.
Entonces, ¿Merece la pena ganar el mundo y perder el alma?
«Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.» (Juan 3:16)
